No caigas en la red
La llegada del verano supone un desafío a la autoestima de muchas personas. Las redes sociales, la televisión, las revistas o las vallas publicitarias se llenan de gente feliz, cuerpos jóvenes, playas de ensueño y diversión por doquier. Y surgen las comparaciones inevitablemente.
Así mismo se intensifica la cultura del cuerpo ideal para la operación bikini, disfrazada de dietas que prometen perder peso en nombre de la salud y que suponen un factor de riesgo para sufrir estados emocionales ansioso, estresantes o depresivos por la presión para adelgazar y la carencia de nutrientes adecuados.
no hay que demonizar las RRSS, sólo darle un uso adecuado
Toda esta sobreexposición no hace más que aumentar nuestra inseguridad y convertir una estación vacacional y de disfrute en un martirio para muchas personas. Visionar el estilo de vida, las relaciones sociales o la apariencia física de los usuarios en las redes puede hacernos pensar que no estamos a la altura de los demás, aumentar la autoimagen negativa y menospreciar nuestra propia vida.
las redes cuentan el mejor instante, no la historia completa
Sin embargo no hay que demonizar las redes, la comparación con los demás es inevitable, el objetivo es minimizar el impacto negativo siguiendo algunas pautas.
Debes analizar qué uso das a las redes. No es lo mismo enfocarte en ti, buscando información de interés o alineada con tus valores y construyendo relaciones significativas, que conectarte desde el aburrimiento, rumiando sobre personas determinadas y pasando de un perfil a otro compulsivamente.
adopta una actitud activa y productiva en las redes
La comparación puede llevarnos a minimizar nuestros éxitos, por eso no debes perder de vista que las redes no cuentan la historia completa, detrás hay una realidad más compleja. Y aunque todo el mundo pasa por dificultades en la vida, no se trata de sentirnos mejor por las desdichas ajenas, sino desarrollar una mentalidad de aceptación y gratitud por lo que tenemos, en lugar de tratar de ajustarnos a imágenes idealizadas.
Evalúa tus emociones al exponerte a las redes
Observa tus emociones y reacciones cuando navegues en las redes. Si al finalizar tus búsquedas notas que te sientes peor que al inicio, es aconsejable establecer límites digitales en cuanto al tiempo que pasas frente a la pantalla así como silenciar las cuentas que te hacen sentir mal.
controla el tiempo que pasas viviendo la vida de los demás
Busca un equilibrio entre las relaciones y actividades que llevas a cabo en las redes y aquellas que estableces fuera de ellas.