La dieta: el camino a ninguna parte
Perder peso se ha convertido en una espiral de frustración para muchas personas, y gran parte del problema radica en el concepto que aún se mantiene de la dieta, aunque sea saludable. O cambiamos el rumbo para conseguir nuestros objetivos, o permaneceremos eternamente en esa rueda de la que entramos y salimos continuamente.
Quizás el primer paso sea poner la alimentación en tus manos, ello no significa que vayas a dejar de cuidarte, implica que serás tú quien la gestiones. Aquí nos asalta el primer temor «no seré capaz de controlarme». No te asustes, probablemente llevas años siguiendo miles de directrices alimentarias impresas en un papel y te has dado cuenta que ese no es el camino, aunque insistas por ese temor a perder el control.
no tiene sentido seguir haciendo lo mismo si no te da resultado
Ser tolerante con tu alimentación, permitirte tomar decisiones no implica necesariamente que vayas a elegir lo que no te conviene. Implica aceptar que hay alimentos más o menos aconsejables (no prohibidos) con los que tienes que convivir e introducir de manera controlada en tu vida.
elimina de tu mente los «no debo» o «está prohibido»
Piensa si a día de hoy el haber intentado eliminar determinados alimentos te ha servido. Probablemente no, todo lo contrario, has llegado a perder el control después de prohibírtelo durante tanto tiempo. Por eso debes abandonar esta eterna lucha que te mantiene en la espiral de la culpa y la frustración.
Y es que después de tantos años buscando soluciones externas (fármacos, recetas, expertos, intervenciones) te has olvidado de escuchar a tu cuerpo, y lo que es peor, has perdido la confianza en tu capacidad para gestionar tu salud.
demanda a los profesionales adoptando una actitud activa
Pide ayuda si la necesitas, pero no como una persona pasiva que acepta los mandatos sin rechistar. Después de tantos años eres tú quien finalmente conoce lo que serás capaz de llevar a cabo, lo que no te ha funcionado, lo que tu cuerpo necesita, lo que te motiva… y para eso estamos quienes para ayudarte debemos escucharte.
